Carlos Aragón, un actor de primera en el círculo de la maldad, en «Cuna de Lobos»

Es un actor que no requiere de gesticulaciones ni de aspavientos en sus escenas, viéndolo no sabe el espectador a qué atenerse, así lo demostró CARLOS ARAGÓN en la serie galardonada Sr. Ávila y en esta ocasión será de nuevo la mano derecha, pero de la villana Catalina Creel (Paz Vega) en la teleserie CUNA DE LOBOS (Las Estrellas, lunes a viernes, 21:30 horas).

Entrevistado por TV&SHOW, CARLOS ARAGÓN expresa su sentir al revisitar este clásico de la televisión mexicana y del melodrama en particular.

-Carlos, ¿qué serás en esta CUNA DE LOBOS 2019?

-Seré Diego Solórzano, la mano derecha, otra vez en televisión, de Catalina Creel (Paz Vega). Me enamoré del proyecto, del reto por revisitar un clásico, de las reuniones de producción con Giselle (González), y de tener libre albedrío para conformar mi personaje.

-¿Serás uno de los lobos?

-Este personaje también dará terror, es hombre enamorado de Catalina, ambicioso, inmerso en un círculo de maldad.

-¿Cómo te consideras como actor?

-Me gusta escoger mis proyector. Me considero un actor libre y creo a la fecha me ha salido bien. No había estado en Televisa los últimos diez años. Trato de tomar los personajes desde dentro, que sean veraces, enfrentarte a un texto que analices para saber cómo lo haría yo. No es necesario mostrar demasiado, para mí menos es más. Con la tecnología que existe, las cámaras dejan ver hasta el cerebelo, no hay mucho que gesticular como en el teatro. Una pequeña mirada es suficiente, a mi humilde parecer.

-¿Qué le dirías a quienes no vieron Cuna de lobos?

-Es una invitación abierta, se encontrarán con verdad en escena, con una historia malévola y retorcida, con el lado oscuro de lo cada quien quiera creer, contada con pasión absoluta. Tan solo una de las escenas entre Paz y Nailea (Norvind), agarrándose, arrastrándose, quedé en shock de verlas, haciéndolo con verdad. Es una historia con toda la verdad.