NUEVA YORK.- GAME OF THRONES conquistó el premio Emmy a la mejor serie de género dramático y aunque es la cuarta vez que la serie de HBO logra el premio, esta edición, la 71, fue más tranquila de lo esperado.
La otra gran ganadora de la noche fue FLEABAG, coronada como Mejor Serie en la categoría de comedias. La producción inglesa fue la protagonista de la noche, con Phoebe Waller Bridge -la creadora y guionista-, que también ganó el título a la Mejor Actriz.
La ceremonia dejó constancia del éxito de HBO sobre Netflix, a la que superó por 32 premios contra 27, en tanto Amazon conquistó 15 títulos.
Los Emmy coronaron también a Bill Porter, la estrella de Pose, premiado como mejor actor protagonista en la categoría drama: es la primera vez que un afroamericano abiertamente gay gana el reconocimiento.
«Estoy contento de haber vivido lo suficiente como para ver este día», dijo Porter en el escenario, con el premio en la mano. Se mostró radiante también Michelle Williams, premiada como mejor actriz en una miniserie por Fosse/Verdon. Al recibir el premio, Williams agradeció a Fox y a los productores de la serie televisiva por «haberla apoyado y haberle pagado» de modo adecuado, del mismo modo que sus colegas hombres.
La actriz se pronunció varias veces a favor de la paridad de pagos: «considero» este premio «como el reconocimiento a cuanto es posible cuando se cree en una mujer, cuando se la hace sentir segura de dar voz a sus necesidades y se la respeta bastante como para escucharlas», explicó Williams.
La noche de los Emmy también volvió a poner bajo los reflectores el caso de cinco muchachos afroamericanos acusados de haber violado a una joven en el Central Park en 1989, y luego absueltos.
Jharrel Jerome ganó el Emmy como Mejor Actor Protagonista de una ministerie por They See Us, la producción de Netflix sobre los llamados Central Park 5. Evidentemente emocionado Jerome dedicó el premio a los cinco muchachos: «Esto es para Raymond, Yousef, Antron, Kevin y King Corey Wise. Gracias, es un honor», dijo Jerome. Los muchachos, invitados a la ceremonia, se levantaron, algunos entre lágrimas, otros levantando el puño.
La velada se llevó a cabo sin presentador, aunque inicialmente parecía que iba a presentar Homero Simpson. El popular personaje apareció en el escenario y dio comienzo a la ceremonia, hablando hasta que cayó un piano del cielo y lo aplastó.
En ese momento Anthony Anderson, sentado entre el público, se propuso como salvador de la velada, pero también en este caso resultó ser falso.
CON INFORMACIÓN DE ANSA
TV&SHOW/ Rondero’s Medios
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