Batman 2022 soporta la crítica y luce como todo un toxicodependiente y vengativo

ROMA.- Un Batman ultra noir (super negro), pero al mismo tiempo frágil como una copa de cristal, un Batman a lo Kurt Cobain -toxicodependiente y vengativo- (VENGEANCE era el título original de este reinicio), así luce la más reciente versión fílmica de este clásico interminable cuyo estreno en salas será este 3 de marzo excepto en Rusia, bloqueada por su invasión a Ucrania.

Un superhéroe, finalmente, también un poco chamán del alma de detective, que parece haber ya conquistado a la crítica que, a embargo terminado, lo exalta. Existe quien ya define The Batman de Matt Reeves como «el mejor filme sobre Batman desde los tiempos de El caballero oscuro de Nolan«.

En suma, un buen viático para la Warner Bros que observa ya con optimismo la el próximo fin de semana para la taquilla, que estará en las sala desde este 3 de marzo (excepto en Rusia donde fue apenas bloqueada su salida).

 «¿Cómo hacer un Bruce Wayne en un modo jamás visto antes? Es lo que se había planteado el director Reeves.

«Simple -explica él mismo-. Y si este muchacho el cual pasó una tragedia (la de asistir justamente al homicidio de sus padres) se convirtiera en un solitario, uno que no sabe qué cosa hacer? Entonces podría transformarse en una especie de rebelde, un imprudente toxico dependiente. La droga Batman -prosigue el director- es su dependencia a la venganza. Y, en suma, como un Batman/Kurt Cobain, el líder de Nirvana».

Inicio místico, con el fondo el Ave Maria de Schubert y las imágenes oscuras del director de fotografía Greig Fraser (candidato al Oscar por DUNE), y enseguida después, en Halloween, la primera víctima de un asesino serial, es decir el alcalde de una Gotham City muy oscura y donde llueve siempre.

Robert Pattinson en la piel de Batman/Bruce Wayney es perfecto para interpretar este superhéroe shakespeariano que lleva detrás una pesada herencia. Aparte del traje de murciélago, existe bien poco que se salve del hombre murciélago tradicional en esta reelectura de Reeves.

Nuestro héroe deambula con paso pesado en su mansión decadente seguido por el fiel mayordomo Alfred (Andy Serkis), o se encuentra por las calles de Gotham City golpeando matones al estilo OLD BOY.

En plena tradición, en cambio, el villano, es decir el Acertijo (Paul Dano), el criminal que está eliminando, uno a uno, a los hombres más poderosos de la ciudad dejando a sus espaldas enigmas.

Se puede decir es el antagonista de Batman más aterrador que nunca gracias al solo rostro extra-large de Paul Diano que, solo a veces, usa una similar-máscara antigas de la Primera Guerra Mundial.

Cierto, para nuestro superhéroe, existe la bella Selina Kyle/Gatúbela (Zoe Kravitz), en el papel una perfecta ladrona acróbata que tiene una debilidad más por los callejeros de la ciudad que por sus habitantes (hecha excepción por Batman).

En suma, Batman de Reeves sigue siendo más bien simple, muy vulnerable, sin embargo, no suelta nunca, como guiado por su rabia, desde las ganas de recrear la noche en la que sus padres murieron.

Dice con claridad el propio Pattinson de su personaje: «Es por eso que sus peleas son muy personales. Es como si cada vez las imágenes de que su adversario es el hombre que mató a sus padres».

Ahora que toda esta torpe y crítica humanidad pasa al espectador y lo conquiste es una cosa plausible, por ahora es aquello que le ocurrió a la crítica.

CON INFORMACIÓN DE ANSA

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