La bella Venecia, en peligro de muerte

ROMA.- El turismo agresivo, el tránsito continuo de grandes cruceros y el paso de millones de turistas, así como proyectos de desarrollo de gran impacto y acciones no necesarias, amenazan a Venecia, que necesita protección urgente, denunció la asociación Italia Nostra.

Sobre todo esto se suma la contaminación, que destruye el ambiente y amenaza la salud de los ciudadanos: «He aquí por qué Venecia está muriendo, en el miope descuido de las instituciones locales y nacionales», alertó Italia Nostra, que hoy anunció en Roma haber pedido incluir a la ciudad véneta y su laguna en la lista de lugares en peligro de la Unesco.

Poco después del incidente, potencialmente peligrosísimo, en el Canal della Giudecca, llega ahora el pedido de un gesto simbólico que, según la histórica asociación, no puede ser postergado.

Del 30 de junio al 10 de junio se realizará en Baku la reunión anual del World Heritage Committee durante el cual se deliberará también sobre Venecia.

Sin tutela de parte del Estado, según la asociación, no tiene mucho sentido a mantener a Venecia en el listado del Patrimonio Mundial. Las 580 grandes naves que cada año entran y salen de la laguna, junto a millones de turistas y camas de hospedaje en continuo aumento, incluyendo Airbnb, convierten a la situación en insostenible.

Italia Nostra presentó también un dossier de 80 páginas para subrayar por un lado las omisiones en los informes que presentó el municipio de Venecia en 2018, y por otro para invitar a los expertos de la organización a analizar con más atención las reales condiciones de la ciudad.

Luego de las recomendaciones de la Unesco en 2016, el municipio veneciano había enviado un documento con avances, tras lo cual logró una prórroga de dos años para alcanzar los resultados esperados. Esta prórroga vencería en julio, pero según Italia Nostra en Baku la Unesco le dará a Venecia otro año.

«Si esta es la tutela de la Unesco, entonces mejor no ser tutelados», dijo Mariarita Signorini, presidenta de Italia Nostra, «nosotros queremos las grandes naves fuera no solo del Canal della Giudecca, sino de toda la laguna».

«En la Unesco no saben que el itinerario alternativo para las naves de crucero en Marghera ya fue cancelado por el actual gobierno, ni que están naciendo nuevos hoteles y que la ciudad es la más contaminada de Italia, con el riesgo de que la morfología de la laguna y su ecosistema desaparezcan para siempre», agregó Lidia Fersuoch, presidenta de Italia Nostra Venecia.

«Lo que pedimos en lo inmediato es la instalación de filtros en las chimeneas de las naves y el uso de distintos combustibles. Y luego que haya tiempos seguros para tomar decisiones mediante un debate público», concluyó.