Con tres nominaciones al Oscar por Mejor Película, Mejor Actriz y Mejor Guión Adaptado, Brooklyn, dirigida por John Crowlye, tiene su mayor potencial en su narrativa, tan pulcramente contada que la cereza en el pastel es la actuación pletórica de emotividad de Saoirse Ronan, actriz de 21 años, entregada con pasión a darle vida a una jovencita irlandesa –ella tiene esa nacionalidad- que, por azahares del destino, emprende un viaje para probar fortuna del otro lado del Continente, en el Brooklyn de los años treinta, que refleja lo que Estados Unidos no puede ni debe olvidar: ser un país de migrantes.

Las decisiones de vida invaden a la joven irlandesa quien deberá escoger entre su recién esposo italo-estadounidense o quedarse en el terruño, con sus viejos fantasmas y a cargo de una madre tan tradicional como acaparadora.
Sin ser la favorita en ninguna de las tres cateogrías postuladas, Brooklyn es el ejemplo de que se pueden producir historias sencillas pero muy bien contadas…y actuadas. También participan Emory Cohen, Jim Broadbent y Julie Walters.
Por Roberto Rondero / Rondero’s Medios



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