NUEVA YORK.- Cate Blanchett se sumó al coro de víctimas dentro del #MeToo, el escándalo por abusos sexuales en Hollywood, al confesar a la revista Variety que el exdueño de Miramax, Harvey Weinstein, se comportó muchas veces «de modo no apropiado» con ella.
La estrella de «El aviador», «Carol» y «Atando Cabos» («Shipping news»), todas películas producidas por Weinstein, respondió con un lapidario «sí», al entrevistador que le preguntaba si Harvey la había molestado también a ella.
«Me daba una fea sensación. Me decía a menudo: ‘No somos amigos’. Y por qué? Porque no hacía lo que pedía hacer», dijo.
Blanchett fue una de las primeras sostenedoras del movimiento «Time’s Up» en Hollywood, pero es la primera vez que habló de modo explícito de su relación con Weinstein: «Desafortunadamente es típico de cierto hombres. Lo quiero ver bajo procesamiento.
Debemos establecer precedentes legales», dijo.
Otras 70 mujeres acusaron al exproductor ante departamentos policiales y juzgados en Estados Unidos y Reino Unido por molestias sexuales y cargos de violaciones.
El «caso Weinstein» destapado en octubre del año pasado, cuando New York Times y New Yorker comenzaron a dejar al descubierto incidentes sexuales con grandes estrellas y aspirantes a actrices, llevó a la bancarrota a los estudios Weinstein Company, que este miércoles fueron vendidos a la sociedad de capital privado Lantern Capital.
La cesión, ocurrida en el ámbito del proceso de quiebra, pondrá fin a la batalla legal que se había abierto alrededor de la sociedad, un vez que sea aprobada por un tribunal del estado de Delaware. En tanto, mientras la actriz Ashley Judd demandó a Weinstein sosteniendo que dañó su carrera porque ella se negó ante sus avances sexuales -en el centro de la acción legal está la afirmación del director Peter Jackson, que refirió que según Weinstein trabajar con la actriz era una «pesadilla»- volvió a destacarse, tras seis meses de silencio, la modelo italiana radicada en Los Angeles, que, protegida por el anonimato, es una de las cinco mujeres que forman el núcleo de la investigación de la Fiscalía de esta ciudad estadounidense. «De estos casos, el de ‘Jenny’ (no es el verdadero nombre de la italiana), está considerado como el de mayor chance de derivar en una incriminación», reportó la cadena CNN, que entrevistó a la mujer en Beverly Hills.
«Los interrogatorios de la policía fueron difíciles psicológicamente. Me hicieron revivir el pasado y fue espantoso, pero ahora no me siento más víctima, soy una mujer fuerte. Estoy lista para decir lo mío ahora y muchas otras veces en el futuro para darle un ejemplo a mis hijos», dijo la italiana.
INFORMACIÓN ANSA
TV&SHOW / RONDERO’S MEDIOS
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