Ya se les conoce como cualquiera que tenga un horario establecido y un salario fijo, sin importar el giro de la actividad económica en el que se desempeñe. Millones de esos seres caminan por todo el país, aglutinando y taponando las venas de cada ciudad, de ahí que se les conozca y se les denomine como GODÍNEZ, EL PODER DE LA QUINCENA (Ediciones B, 224 páginas), libro escrito por Arturo J. Flores, Editor en jefe de la revista Playboy México.
«Este libro -apunta Flores- es un pequeño paso para el hombre que lo redactó…pero un gran paso para la clase trabajadora.
«Los Godínez somos una especia superior con pinta de inferior, igual que las cucarachas. A los patrones les gusta aplastarnos, pero nuestra dieta insalubre, nuestra infinita capacidad de adaptación, nuestra tolerancia a la frustración y nuestra inevitable capacidad de reproducirnos, nos convertirían en los únicos sobrevivientes a un ataque nuclear.
A lo largo de este libro todos los Godínez están reflejados. Este libro se ríe de ti y contigo. No interesa si trabajas en una dependencia de gobierno, si eres contador o editor, si llevas tuppers al trabajo o compras en la cafetería de moda, si ganas mucho o poco: tú eres un Godínez.
La canasta básica del oficinista para un Godínez, incluye: Hojas blancas, un cactus miniatura, un cojín para el respaldo, audífonos, videojuegos, tortas de chilaquiles, tarjeta del metro/ metrobús, la tanda, Wifi, estacionamiento para la bici, maquinita de dulces, botiquín, archivero, leggins o camisa slim fit, marca textos, el tapón de la pluma, el teléfono de las pizzas, un diseñador, y el insustituible garrafón de agua.
CON LETRA GRANDE
Por Roberto Rondero / Rondero’s Medios


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